sábado, 30 de noviembre de 2013

GINEBRA PARA DOS

Últimamente estoy bastante espesa para leer, muy ocupada con los Libros Solidarios para Samuel, pero no quería perder ese hábito de leer todas las noches un poco, de manera que decidí recurrir a lecturas más frescas y entretenidas, fáciles y que no me exigieran excesiva concentración.
Mi elección esta vez fue Rebeca Rus, a la que no había leído nunca, aunque sí había leído varias reseñas de sus libros, y me llamó la atención.
Esta pequeña novela, que no llega a las 200 páginas yo la calificaría de comedia romántica, si fuese una película sería la típica protagonizada por Meg Ryan y de la que aunque intuimos el final feliz, nos gusta el camino que conduce a él.

La protagonista de la historia que nos cuenta Ginebra para dos es Silvia Vega, treintañera y mujer de gran éxito profesional, directora creativa de una de las mejores agencias publicitarias de España. Silvia y su empresa se presentan a un concurso para ganar la cuenta de publicidad de una importantísima marca de cosméticos que supondría una inyección económica considerable.
Ella y otros compañeros se desplazan a Ginebra para realizar sus propuestas a la empresa.
Allí de manera accidental encuentra a un hombre, Daniel Soler, que hace que el corazón de Silvia se estremezca, un desconocido que la atrae poderosamente, hacía años que no se sentía de esta manera... Pero pronto sabrá Silvia quién es Daniel Soler, nada menos que el creativo de la competencia.
Comienza entonces una batalla interna en Silvia, que por un lado se siente atraída por el hombre y por otro se recuerda una y otra vez que le odia, que ha leído mil artículos sobre él antes y la manía que le tiene... Además de esta lucha interna, Silvia ha de hacer lo imposible por tratar de ganar la cuenta suiza, y todo este proceso es el que viviremos con ella, su agobio por no saber qué hacer, sus inseguridades a pesar de su apariencia de mujer que va pisando fuerte y segura... una protagonista muy creíble y bien construida.
Me he entretenido muchísimo con esta lectura, muy simpática, con situaciones ridículas que sacan la sonrisa del lector, momentos enternecedores, otros más tensos... y en todo momento pensando ¡que se decida ya, están hechos el uno para el otro!
Pasaréis un buen rato con Ginebra para Dos, muy aconsejable, sobre todo para leer en momentos que apetece algo ligero que nos haga sonreír y pasar un rato agradable, Rebeca Rus nos cuenta este capítulo de la vida de Silvia con mucha frescura, abundancia de diálogos muy fluidos y una protagonista que podría ser cualquiera, con la que resulta fácil identificarse como mujer y como profesional.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

RESTAURANTE MANSO. COMPOSTELA

Hacía tiempo que tenía ganas de probar este restaurante. El año pasado me quedé con las ganas de acercarme con motivo de la celebración del concurso de tapas, y me quedó esa espinita clavada. Un año después por fin pude conocer al establecimiento que actualmente ocupa el local que hace unos años era el Anexo Vilas, en la Avenida de Vilagarcía.
Al entrar en el restaurante Manso, nos encontramos con dos zonas bien diferenciadas, en la planta baja, vinos y tapas y en la entreplanta, separadas por varios escalones, el comedor, amplio, luminoso y muy acogedor.
Aunque las referencias que tenía de este local eran que su punto fuerte estaba en las carnes, lo cierto es que cuando llegó la carta, nos costó muchísimo elegir qué comeríamos, porque en ella había muchas propuestas de lo más apetecible, con toques patrios y alguno que otro más exótico.
Al final nos decantamos por compartir un primero que resultó muy sorprendente, por sabroso, por diferente y por la enorme calidad de las verduras: Verduras
recuperadas de Galicia, pak choi  y huevo encurtido.
Las verduras, como nos comentó el camarero, eran provenientes de La Finca Los Cuervos, que está haciendo un fabuloso trabajo proveyendo a restaurantes de toda Galicia de verduras difíciles de encontrar y cultivadas de manera ecológica. Y vaya si se nota!
Como segundo plato mi marido se decantó por el pescado y eligió un taco de bacalao a la brasa con brandada y guisantes del que no quedó ni media miga.


Yo no quería irme de allí sin probar su tan afamada carne, así que entre las opciones que había en la carta, a cada cual más tentadora, opté por las brochetas de vaca de Bandeira adobadas y hechas a la brasa con espuma de patata y patata chip, maravillosas, una carne tiernísima, jugosa, en su punto justo... una delicia.







Llegada la hora del postre, ya con apenas sitio para nada más porque aparte de los platos fantásticos de los que dimos buena cuenta, llegó una cestita con unos bollitos de pan estupendos y todavía calentitos, imaginaos!

En fin, que nos pedimos un café y lo acompañamos de una cajita de trufas caseras que estaban como el resto, de lujo.



Sólo me queda recomendaros que no dejéis pasar la ocasión de acercaros a este restaurante compostelano, porque realmente vale la pena, y mucho.

lunes, 18 de noviembre de 2013

LA BODA DE KATE

Marta Rivera de la Cruz es para mí desde hace tiempo, desde que leí su Hotel Almirante, una apuesta literaria segura. Con su última novela la escritora lucense vuelve a regalarnos una historia maravillosa, con la peculiaridad de rescatar personajes de novelas anteriores, por lo que los que ya hemos leído algo suyo antes, reconoceremos a algunos, como a Shirley Saunders y Anna Livia Shzerny, amigas de la protagonista, además de la ciudad en la que se sitúa la acción principal, Ribanova y el Hotel Almirante.

SINOPSIS (Extraída de la web de la novela)

Después de que el inesperado éxito de las novelas de su fallecido tío Albert la hiciese heredar una pequeña fortuna, la reposada y sensata Kate Salomon vive una existencia plácida en la pequeña ciudad de Ribanova. Comparte con dos amigas una preciosa casa con jardín y tiene una pequeña librería donde recibe la ayuda de Ahmed, un muchacho pakistaní que vende rosas por las noches. Viuda desde hace tiempo, Kate está convencida de que la vida no puede reservarle demasiadas sorpresas. Pero el día de su 71 cumpleaños sucede algo totalmente inesperado: Forster Smith, el hombre al que rechazó tres veces y del que lleva enamorada toda la vida, se presenta ante su puerta con un ramos de rosas amarillas y una propuesta de matrimonio.

LEYENDO

Como os comentaba, me gusta mucho Marta Rivera de la Cruz, y hasta ahora no me ha decepcionado ninguno de los libros que he leído. Creo que tiene una habilidad muy especial a la hora de crear los personajes, en ello está para mí su fuerte, gentes que tienen sus particularidades, excentricidades... que suelen ser diferentes, originales, pero al mismo tiempo muy bien definidos, perfectamente creíbles y que logran quedarse en la mente del lector. La autora nos demuestra que incluso pueden permanecer y recuperarse en otras historias, como es el caso en La Boda de Kate, algo que me ha gustado muchísimo, ha sido como encontrarse viejos conocidos, recordar sus historias pasadas de otras novelas...
También el escenario se repite, la ciudad de Ribanova (nombre literario que da Marta Rivera a Lugo, su ciudad natal), así como el Hotel Almirante, reaparecen. Es más, la librería de Kate existe en realidad, así como la pastelería a la que ella acude y un montón de rincones que se nombran en la novela, invitando al lector a recorrer Lugo de la mano de la historia de Kate.
Haremos un recorrido por la vida de Kate desde su adolescencia hasta la actualidad, con 71 años, y los lugares más importantes de su vida, Inglaterra y por supuesto, España.
También sabremos cuál ha sido el recorrido vital del pretendiente de Kate y la relación entre ambos desde el principio.
Las amigas con las que Kate decide compartir su vida en Ribanova, el encanto de su biblioteca, Ahmed, su encantador ayudante, su sobrina Laura y Jeffried Ruskin, editor de las novelas de su tío a los que la boda de Kate cambiará la vida... son muchos los personajes que acompañarán a Kate en su historia y que tienen cierto peso en la historia.
Una delicia pasearse por esta historia, conocer a Kate y a todas las personas que con ella se relacionan de alguna manera, disfrutar de Ribanova, de las veladas en el Hotel Almirante, de ese enorme almacén de la librería, donde se guarda como un tesoro un ejemplar de cada libro que entra en la tienda... son muchos los detalles de una novela muy cuidada y si queréis saber algo más os aconsejo que visitéis la web oficial.

Una novela que os recomiendo y de la que os dejo dos párrafos, uno sobre el viaje que hace Kate a mi ciudad y otro que explica lo importante que es para un escritor aquello que ocurre en su vida,

"El viaje fue lo más parecido a un éxito. Santiago les enamoró a los dos, con su lluvia fina y aquel extraño color de las piedras cubiertas de líquenes. Una tarde hicieron una visita a los tejados de la catedral, y la visión aérea de la Plaza del Obradoiro les conmovió a ambos de la misma manera" (pág. 41)

"Si alguna ventaja tiene el que se dedica a la creación, es que cada golpe vital puede convertirse en materia narrativa" (pág. 297)

viernes, 15 de noviembre de 2013

CIEN MIL



Cien mil lecturas ya en este blog, 259 entradas, 120 seguidores, quién me lo iba a decir a mí cuando aquel mes de febrero de hace casi ya tres años decidí embarcarme en esto de tener mi propio blog.
Sólo decir gracias, cien mil gracias por otras tantas veces que os habéis asomado por aquí, cien mil gracias las por vuestros comentarios, por haceros eco de lo aquí publicado...

Estas cosas animan a seguir, por supuesto, lo haré mientras al otro lado alguien considere interesante dejarse caer por este blog que sólo me ha traído cosas buenas, gracias a él he conocido a un montón de personas a las que he ido desvirtualizando y que ahora considero amigos, blogueros gastronómicos, blogueros literarios, blogueros de turismo y otras gentes no necesariamente blogueras... no estoy de acuerdo en que las redes sean frías y todas esas cosas que dicen otros, hasta ahora mi relación con ellas, con el blog, Twitter y Facebook, sólo me ha llevado a encontrar un montón de gente buena con la que espero seguir relacionándome siempre!
De nuevo

GRACIAS

lunes, 11 de noviembre de 2013

#NOITEGARUM

La propuesta era de esas que no pueden rechazarse: siete de noviembre a las nueve y media, siete comensales, siete propuestas y un lugar: Garum Bistró y su presentación de los nuevos platos de la carta otoño-invierno.
Nada mejor para empezar que probar las dos tapas que este establecimiento presenta al concurso que está teniendo lugar en Santiago y que se prolongará hasta el día 24 de este mes de noviembre.A la izquierda, atún escabechado con crocante de arroz y wasabi, un bocado fresco con un ligero toque picante.
A la derecha, falafel con pulpo a la brasa y alioli negro. Os recomiendo que no os perdáis ninguna de las dos tapas.Tras la desvirtualización de algunos amigos tuiteros y conocer a otros nuevos, pasamos a la mesa, donde nos atendería Juancho, con muchísima profesionalidad y conocimiento del producto, algo que es de agradecer y no siempre se encuentra cuando uno sale a comer fuera.
Con la compañía de un vinito catalán en la copa, Alta Alella, llega el momento de probar el menú. El comienzo, espectacular, huevo curado en soja con crujiente de patata. Nos conquistó a todos absolutamente!
Un plato impresionante que nos explicó con detalle
Eloy, uno de los cocineros del Garum, y que nos dejó encandilados.


A continuación llegó el turno de la polenta con migas de bacalao, huevo y polvo de aceitunas negras.
Un bocado intenso con la cantidad justa de polenta para que no resultase demasiado pesado.


Llega el turno de la carne, unas costillas de cerdo cocinada a baja temperatura durante diez horas con bourbon y miel, una textura y un sabor sorprendentes!


Esa cazuela con ese colorcillo y esa pinta maravillosa es una sopa de mejillones con tomate, leche de coco y un toque picante. Aunque para mí estaba un poco picante de más, la sopa es estupenda, y me llamó muchísimo la atención ese toque de coco, que en un principio no se nota cuando se prueba la sopa, pero cuando pasa un ratito sí llega al paladar, me pareció un plato diferente y con un toque original con muy buen resultado.


La crema de maíz con langostinos salteados en cilantro y limón fue lo que probamos a continuación. La proporción de cilantro y limón la justa para que ninguno de los dos ingredientes, bastante rotundos por sí solos, estropease el bocado. La crema de maíz me pareció un poco escasa de sabor, pero quizá fue por el intenso sabor del plato anterior, habrá que volver a probarla.



El lomo de listado con judías y champiñones nos dejó sin palabras a todos los comensales. Pescado en su punto justo, caldito fantástico, verduras al dente y una combinación perfecta. Es difícil que este tipo de pescado esté jugoso, según nos comentó Eloy, unos segundos bastan para pasarse y que se quede seco, os aseguro que esa noche no hubo ni un segundo de más ni uno de menos.
La presencia de Xosé, el proveedor de pescado del restaurante y gran entendido en la materia, nos confirmó la sensación de perfección de este plato, interesantísimo tener en la mesa a alguien que sabe tantísimo de los productos del mar.



A estas alturas de la noche ya creímos que no podíamos comer más, pero cuando llegó esta carrillera de ternera gallega con crema de guisantes y tomatito cherry asado, estaba tan buena, que a ver quién decía que no!



El colofón final sólo podía ser un postre fresquito y ligero, y lo era: Mousse de manzana asada con helado de canela y un chorrito de vino de Oporto. Buenísimo, especialmente el helado de canela, soy muy fan.
Balance de la noche: servicio y cocina impecables, ambiente fantástico y compañía de lujo. Os recomiendo que os paséis por el Garum, alguno de estos platos os gustará, seguro!



Foto de familia de una velada memorable. Juancho, el camarero de nuestra mesa, José Manuel García, el perfecto maestro de ceremonias, María Cheda, periodista de Antena 3, Lucía, de Conservas Artemar, Ramón Castro, periodista de Onda Cero, Xosé, proveedor de pescado del Garum, servidora, Alberto, bloguero gastronómico y los artífices de los platazos que nos sirvió Juancho: Eloy y Vera. Aplausos!!

sábado, 2 de noviembre de 2013

ILLAS ATLÁNTICAS DE GALICIA

Bajo este título el tándem profesional integrado por el fotógrafo Ricardo Grobas y la periodista Edurne Baines nos hacen llegar una joya en forma de libro en el que hacen llegar al lector que quiera adentrarse en sus páginas, escritas en gallego, español e inglés, una minuciosa información para el visitante de las islas que conforman el único Parque Nacional con el que cuenta Galicia y que es un verdadero paraíso: rutas de senderismo, playas, lugares desde donde los paisajes son un regalo para el que los contempla, de día, de noche... las especies marinas que nos esperan bajo las cristalinas aguas de las islas, los marineros que aquí ejercen su profesión, enclaves famosos y otros que descubriremos gracias a este libro y que Edurne nos describe, nos cuenta su historia, nos habla del presente y el pasado en unos textos breves, concisos y de lectura más que agradable.
La parte que toca a Ricardo Grobas, tal y como podemos leer en el propio libro, deja ver claramente esa "paciencia, minuciosidad y conocimiento del medio".

Dos apasionados del mar, de sus paisajes, de la sensación de poder navegar gracias a sus vientos, sumergirse para convivir con los habitantes de las aguas... algo que han sido capaces de transmitirnos en forma de libro, el deseo de conocer más, de poder visitar todas y cada una de las islas del Parque Nacional das Illas Atlánticas: Cíes, Ons, Sálvora y Cortegada, por las que podemos pasearnos gracias a las bellísimas fotografías, de las que podemos disfrutar durante todo el año, un libro que huele a mar, a puesta de sol, a arroaces juguetones persiguiendo a un velero, a cariño y a pasión.

Si no conocéis el blog de Edurne, en el que la parte fotográfica corre a cargo de Ricardo Grobas, os invito a que no tardéis ni un minuto más en pasaros por él: Vivir Galicia, donde descubriréis otros rincones de nuestro hermoso país. Encontraréis también más información y fotografías sobre el libro del que hoy os hablo y que os invito a poner en vuestra estantería, lo gozaréis enormemente, no lo dudo.

viernes, 1 de noviembre de 2013

MAMÁ


Hoy no te recuerdo porque toca, por ser la fecha que es, pero precisamente por eso, por ser la fecha que es, hoy, como todos los días del año estás en mi mente.
Tienes un nieto maravilloso, lo sabes, sé que estarías absolutamente prendada de él, tiene tantas cosas que te harían disfrutar con su compañía... Mario sabe que no estás, hace unos días me preguntó por qué te fuiste y a pesar de los años fui incapaz de contestar, un nudo en mi garganta, unas lágrimas que acudieron a empañar mis ojos y una frase salvadora de su padre desviando el tema, pero no es fácil dejar cosas sin respuesta para él: "Cariño, no importa cómo fue, simplemente no está".
Pero sí importa, claro que importa, y duele, mucho, cada día, cada hora... Llegué de trabajar aquel cinco de enero de 2005, la comida ya casi estaba lista y la tarde se presentaba llena de papel de regalo, etiquetas y cajas que esperaban su vestimenta colorida para convertirse al día siguiente en una sorpresa, en una sonrisa, en un día de ilusión, un día que tú hiciste que siempre fuese especial, que nunca perdiese su magia.
Sonó el teléfono y la voz entrecortada de papá me dijo que subiese a Santiago, que te habías marchado. Me paralicé, no podía creer lo que me llegaba desde el otro lado de la línea y empecé a buscar en mi mente nuestra última conversación, necesitaba saber cuál era la frase, la palabra que te habías llevado, si había sido amable, cariñosa, si era digna de ser ese último recuerdo. Seguramente no, pero no lo sabía, de haberlo hecho te hubiese repetido hasta la saciedad lo que te quería, lo duro que era llevar tu enfermedad pero que nada haría que te dejase de querer, de hacerlo a pesar de tus defectos, gracias a tus virtudes, a todo lo bueno que me transmitiste, a pesar de los errores que cometiste y yo trato de no repetir.
Mamá, el 25 abril hubieras cumplido 68 años, pero te marchaste con 59, soñando con la jubilación y los viajes que harías para visitar a la familia a Perú, el día 21 de enero es nuestro santo, ahora lo celebro sola, este verano, el 15 de agosto papá y tú hubieseis celebrado vuestro aniversario de boda, nada menos que 43 años juntos... recuerdo tu emoción cuando celebramos las bodas de plata y lograste que papá viajase contigo a Roma.
Hoy también te recuerdo, mamá, pero como cada día, como cada vez que algo me trae a la memoria tu recuerdo, esas clases de latín en verano, esa maravillosa mitología romana que me contabas como si fueran cuentos, ese punto de cruz que compartíamos, esas compras en Portugal en las que disfrutábamos muchísimo, cada vez que miro a mi hijo, cada vez que le digo que le quiero, cada vez que me abraza y me dice que me quiere, una frase que tú también repetías hasta la saciedad.
Estés donde estés, siempre, siempre estarás en mi corazón